XXIV MEDIA MARATON DE SANTA POLA

Esperanza es la fuerza que nos llena de ánimo cuando estamos desesperados
Gilbert Keith Chesterton

Esta vez no comenzaré mi crónica, narrando desde la llegada a la localidad de turno, ni tan siquiera desde el comienzo del desplazamiento, hoy quiero comenzar la crónica de la Media Maratón de Santa Pola, desde la noche de antes, pues cuando me acosté el sábado, (no muy tarde pues había quedado a las 6 de la mañana con Ángel en Albacete), la verdad que me hacia bastante que pensar lo que nos encontraríamos a la mañana siguiente en Santa Pola, porque el Dios Eolo, parecía que estaba "cabreao" con El Salobral, que manera de bufar, estaba ya en la cama, y parecía que iba a salir la casa volando, (que intranquilidad la leche).
Menos mal que al levantarme a las 5:10 de la "madrugá" (no tengo bastante de levantarme todos los lunes a las 4:45 para irme a Almagro, si no que este Domingo también, ¿"Me estaré volviendo tonto"?), el viento ya no soplaba de esa manera como la de la noche, por lo menos auguraba algo bueno. El caso que fui a casa de Ángel, cogimos su coche y fuimos a recoger a Juan Carlos Aroca, y a un amigo suyo que nos acompañó a nuestra aventura, sobre las 8 menos cuarto ya estábamos en Santa Pola, no sin antes acojonarnos un poquito porque a la altura de la zona de Novelda el viento volvía a hacer de las suyas, llegamos tempranito pues había que recoger el dorsal y según el reglamento a las 9 cortan, y no es cuestión de arriesgar, cafetito, a cambiarnos para la salida, estiramientos, calentamiento (vamos lo normal), además nos juntamos con José Andrés que había venido desde Aspe, y a coger posición.
Me vais a llamar tonto, pero hacia mucho tiempo que no tenia las sensaciones y emociones que tuve los minutos antes al disparo de salida, todo ese gentío, pues corrimos algo mas de 9.000 almas, el espectáculo de sonido, los speakers, las gradas repletas de público, de verdad que me sentí muy emocionado y ya son unas cuantas las Medias Maratones que he disputado, la verdad para los que lo habéis vivido no tengo nada que explicaros, pero para la/os que no, es algo que deberíais de experimentar alguna vez, como diría ese grande de la locución, dos palabras "IM PRESIONANTE".
Una vez acabada la crónica general para la pagina del equipo, quiero dejaros mis sentimientos, casi se me escapó alguna lagrimilla momentos antes de la explosión de color y sonido que es el pistoletazo de salida de Santa Pola, lagrimillas de tristeza al recordar lo que llevo pasando desde hace año y medio aproximadamente, y lagrimillas de esperanza al pensar que si hay suerte puede que este calvario se acabe, pues me he puesto en manos de Nuria (podóloga), para intentar mitigar en lo mas posible este maldito dolor de rodilla.
Haciendo balance de ese maldito "año horribilis" que ha sido para mi el 2012 en cuestión deportiva, la única conclusión que realmente he podido sacar ha sido; que es imposible, que por mucho que uno mismo lo intente sin ayuda de especialistas no se puede solucionar un problema de lesión y que cuanto mas intentas, si lo intentas mal es peor. Si, se que es una obviedad pero hasta que no te das cuenta de ello de una forma evidente no paras y lo que es peor que cuanto mas lo intentas mas te desanimas y menos te pones las zapatillas.
Dicen que año nuevo, vida nueva. Es lo que voy a intentar, pero poco a poco, será la única manera efectiva de realizar cambios.
Ya os seguiré contando.